¿Sabes qué es el Lipedema? Quizás te hayan dicho que es lo mismo que la celulitis, pero nada más lejos de la realidad.
En términos médicos conocemos por lipedema a una alteración en la distribución de la grasa, que afecta al 5% de las mujeres por causa hormonal estrogénica y que se localiza desde las caderas bajando a las piernas y los tobillos.
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Se altera la forma natural de la silueta y genera una desproporción entre las piernas y el resto del cuerpo que va más allá que la celulitis localizada, ya que afecta a capas más profundas y generalizadas que las relacionadas con ésta.
Es fácil reconocerla si te fijas en que produce hinchazón simétrica en las piernas, pesadez e hipersensibilidad al dolor incluso ante una leve presión, además de fragilidad capilar.
Los tratamientos que pueden aplicarse a las personas que padecen lipedema, pueden ser desde las medidas más conservadoras en casos muy leves, o el tratamiento quirúrgico para los casos más avanzados.
En este último caso, cuando el paciente ha decidido someterse a una intervención para solucionar un problema que ya ha ido más allá de lo estético, ha de ser consciente de la particularidad de la intervención y de las múltiples técnicas que los profesionales podemos emplear en la cirugía.
Entre las técnicas quirúrgicas más aconsejables, se encuentra la técnica WAL (Water Assisted Lipossuction) aplicada a través del dispositivo BodyJet -del fabricante alemán -, una cirugía que ofrece una recuperación y unos resultados más suaves y amables para el paciente
La técnica implica:
- Una irrigación más suave y precisa, utilizando distintas frecuencias e intensidades del fino chorro de agua en forma de abanico que puede ser ajustado para las diferentes estructuras de los tejidos conectivos. De esta forma es posible una mayor precisión y evitando las lesiones de los tejidos circundantes.
- Evitar la inflamación a base de infiltración de líquido de la zona a tratar (técnica tumescente), consiguiendo del mismo modo una mayor precisión y evitando las lesiones de los tejidos circundantes. Además al evitar la inflamación de la zona para la extracción de la grasa, se reduce el riesgo de hematomas y se ofrece una recuperación más temprana y menos dolorosa.
- Cánulas especiales (de entre 2,5 y 3,8 mm de diámetro) que permiten una irrigación y aspirado simultáneo, reduciendo el tiempo de operación.
Se trata, por lo tanto, de una técnica que aplica los avances tecnológicos para aprovechar la fuerza del agua y así obtener una cirugía (liposucción) más suave y menos invasiva que ofrezca a los pacientes junto a unos resultados naturales y espectaculares, una recuperación más corta y menos dolorosa.
Las ventajas de la técnica WAL son tantas que ya muchos expertos optan por esta cirugía menor para solucionar las acumulaciones de grasa que conforman el Lipedema, una solución que además favorece una rápida recuperación, ya que el paciente deja de notar hinchazón y malestar en las zonas afectadas.
Para completar la aplicación de la técnica con seguridad, los expertos recomendamos el análisis previo de las zonas a tratar, partiendo de un estudio del sistema venoso en torno al cual se produce la acumulación de grasas.
En esta zona es posible que el paciente ya presente alteraciones de venas varicosas, y por eso se deben tratar previamente.
Como en muchas actuaciones a estos niveles, recomendamos el uso de medias de compresión tanto antes de la cirugía (con la idea de preparar la zona para una mejor recuperación del paciente) como después de la aplicación de esta novedosa técnica, de forma que el movimiento habitual de la persona genere gracias a esas medias un masaje drenante linfático que ayuda al correcto funcionamiento de la circulación.
Las técnicas conservadoras que puede ayudar a tratar el lipedema son: el drenaje linfático manual, la presoterapia, ondas de choque, mesoterapia, radiofrecuencia y algunos tratamientos con láser, pero ninguno de ellos ofrece los destacados resultados de la técnica WAL, debido a:
- El bajo impacto de la fuerza mecánica durante la liposucción. Aspiración moderada y potencia selectiva del chorro de agua.
- La mayor precisión y conservación de tejidos que reduce el riesgo de hematomas y acorta el periodo de recuperación.
- La simultánea irrigación y aspiración reduce la necesidad de un mayor volumen de liquido a infiltrar.
- La presión del fino chorro de agua en forma de abanico garantiza una actuación más selectiva y precisa, lo que permitirá un menor estrés del tejido adiposo subcutáneo circundante, así como de los nervios y los vasos sanguíneos.
Si buscas más información sobre esta solución al lipedema, puedes consultarnos tus dudas a través de la dirección de contacto que encontrarás en esta misma web, la de tu centro de referencia, ICMCE, y pedir cita con el especialista Dr de los Ríos (cirujano plástico).
